¿Qué, qué?, dijo el Pibe. Si un gobierno medio loco, o loco y medio, decide aplicar el artículo 19 de la Ley 617 de 2000 (viabilidad financiera de los municipios y distritos), más de la mitad desaparecen del mapa. La norma en mención fue promulgada durante la administración del presidente Pastrana, como si se tratara de una entidad financiera detrás de la utilidad del capital y no de un ente territorial con un objetivo social. Es el verdadero capitalismo depredador y salvaje a que se refiere el economista francés Thomás Piketty.
Esta ley redactada en forma compleja y torcida, habla de fortalecimiento de la descentralización del gasto y al mismo tiempo de una racionalización del mismo, es decir, es un atentado contra la autonomía territorial que disimula el afianzamiento del centralismo perverso. Es un sancocho trifásico normativo (carne de res, cerdo y pollo descompuesto). Habla de todos los temas: categorización de los municipios, saneamiento fiscal, régimen de inhabilidades, etc, menos de dinero.
Nuestro servicios
cuellofrancisco@gmail.com
310- 367 17 79
Vale aclarar que de los 1103 municipios que tiene Colombia, el 87% pertenecen a la sexta categoría, donde un alcalde confundido, con poco personal y las manos atadas trata desesperadamente de cumplir con su programa de gobierno, con sus pocos ingresos. El municipio se mueve cada vez que le giran las transferencias del Sistema General de Participaciones (Ley 715 de 2001) por conducto del Ministerio de Hacienda y Crédito Público. Son pueblos de pocas industrias y comercio y un predial también limitado por su desactualización. Las grandes fincas bananera, palmeras, cafeteras, ganaderas o avícolas no pagan impuesto, pues la Ley 14 de 1983, en su artículo 39 numeral 2º, literal a) las protege. Por esto se nota la riqueza de unos pocos y el hambre de miles de ciudadanos alrededor del palacio municipal en busca de un salario mínimo. Un bostezo colectivo al medio día, contrasta con el eructo sonoro de unos pocos que viven en las capitales.
Dante Alighieri. Escritor de La Divina Comedia
En muchos pueblos, los domingos por la tarde, las iglesias están llenas de fieles arrepentidos implorando perdón por sus travesuras. En esas filas están los contratistas que le han robado la comida y el agua a los niños pobres. Ellos no tienen perdón de Dios, pues son adjudicatarios de una hermosa paila caliente en el infierno, administrada por un diablo desnudo con un trinche brillante.
Veo al diablo gustoso de tener visitantes de estas tierras macondianas, que seguramente van a hacer menos doloroso el suplicio de los condenados que imploran perdón. Los paisajes de Dante en la Divina Comedia son cosas de un juego de niños.
Excelente articulo ,Doctor Cuello, es bastante académico para lo público y con mucha realidad el paralelo de la Ley 617 de 2000 ME gustó este artículo